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Un animador 2D desarrolla imágenes gráficas que simulan el movimiento mientras trabaja en un espacio artístico bidimensional. El artista utiliza un guión gráfico para crear esta forma de animación tradicional pero sin la profundidad que aparece en el arte 3D.
El animador de 2D suele crear imágenes dibujadas a mano en una superficie plana como el papel, una celda transparente o un storyboard computarizado y luego dibuja una nueva imagen para cada fotograma del movimiento. Una vez completado, el animador fotografía o filma los fotogramas en sucesión para producir la acción.
El 2D se denomina a veces animación de tinta y pintura porque los fotogramas se dibujan y colorean a mano y luego se filman juntos para mostrar la acción.
Los animadores por ordenador utilizan imágenes de mapa de bits y vectoriales en lugar de celdas de película o papel. Una animación puede tener cientos de fotogramas, cada uno de ellos creado individualmente, diseñado y modificado ligeramente para que, al combinarse, la figura parezca moverse.
A diferencia de la animación por ordenador en 3D, los artistas en 2D llevan siglos contando historias con este método. El primer ejemplo de animación 2D es la copa de 5.200 años de antigüedad encontrada en Irán.
El papel principal de un animador 2D es crear, ya sea dibujando a mano o utilizando un programa de imagen, cada fotograma necesario para simular el movimiento.
Trabajan en publicidad, entretenimiento, juegos e incluso en la industria de la arquitectura y la educación. Dondequiera que se utilice el movimiento para contar una historia o hacer un punto.
Un animador de 2D puede ser la fuerza creativa detrás de la producción, proporcionando la idea básica y los dibujos iniciales y luego supervisando a un equipo de artistas para desarrollar los fotogramas necesarios para completar el proyecto.
El animador supervisaría al equipo de producción desde el inicio, pasando por la creación de fotogramas y gestionando el desarrollo de la animación.
A menudo, un proyecto de animación 3D complejo, como los personajes o el fondo de un juego, comienza en 2D. Una vez creado el guión gráfico inicial, el trabajo es asumido por un artista 3D y ampliado para terminar el trabajo.
El animador 2D sienta las bases haciendo bocetos y creando fotogramas que se convertirán en animaciones 3D como exposiciones temáticas, juegos de ordenador o incluso una película.
Los directores de cine, teatro y televisión contratan a un animador de 2D para crear guiones gráficos mientras bloquean sus producciones.
En este caso, el animador creará bocetos basados en la visión del director y la historia que se cuenta.
Más tarde, los actores, los responsables de atrezzo y los arquitectos de escena utilizan la animación para desarrollar su parte de la producción.